esta mañana me saludó el tiempo en el espejo
iba de espaldas
sábado, noviembre 21, 2009
viernes, noviembre 06, 2009
Las uniones no se marchitan
puede que el relámpago altere súbitamente las valencias
que el fondo de botella escenifique la muerte
en un monitor vendado
uno nada en el ámbar quístico de la soledad
se acuesta en sofases embrionarios
ablanda espinas al vapor
se subleva contra la cooperación inadmisible y falsa de los ciegos
que se ayudan a cruzar la calle
la humedad metálica oxida la piel detrás de las rodillas
han sido largas horas de rigurosidad para las rótulas
cuando el ombligo llega a la retina
se emerge a través de un trayecto fistuloso de escalera
todavía sudando
se renace del barro moldeado por las manos sucias
de nuestro propio ancestro
en forma de costilla
de Tu mano limpia esperando
celebramos entonces el tiempo breve hasta la imagen viva
puesta a secar al sol sacrosanto del papel
entre tantas lunas
impacientes de mareas
y volvemos a latir
en eclosión caleidoscópica
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